Plataforma Electoral de la UP (I)
En abril del año pasado, el 8º. Encuentro Nacional de la UP proclamó su fórmula electoral. En un nuevo Encuentro Nacional en noviembre, como fruto de un proceso democrático ejemplar, la UP aprobó su Programa. En realidad, lo que hizo este 9º. Encuentro de noviembre fue profundizar y actualizar un Programa cuya base se fundamenta en las mejores tradiciones de la izquierda.
Es importante, ante todo, aclarar nuestra pertenencia a la “izquierda”. Tres gobiernos sucesivos del FA desprestigiaron esta palabra, el mismo modo que lo hizo el PT en Brasil.
La “izquierda”, a la que pertenecemos llegó al Río de la Plata en los sueños y los anhelos de humildes inmigrantes artesanos y obreros. Ellos sembraron sindicatos y centros culturales para los trabajadores y sus familias. Cuando conocieron la tradición artiguista, comprendieron que ellos, los trabajadores organizados, eran los continuadores naturales de aquel proyecto popular, en un umbral superior de conciencia, y con herramientas sociales y políticas nuevas para su realización. Hoy, para diferenciar la “izquierda” verdadera de los usurpadores del término, nuestra Plataforma Electoral sentencia: “Donde empieza la corrupción se acaba la izquierda”.
Y así legamos a nuestra flamante Plataforma Electoral 2019. Su redacción no necesitó un nuevo Encuentro Nacional, porque en realidad es la síntesis del Programa aprobado en noviembre; pero su versión final se sometió a consultas con representantes de todas las organizaciones políticas de la UP para comprobar que su redacción era clara pese a su necesaria brevedad.
Coherente con la teoría y la práctica de la UP, consecuente con nuestra unidad política en el marco de la diversidad ideológica que nos caracteriza, la Plataforma tiene una breve introducción, a la que no siguen promesas bonitas, sino la descripción de los instrumentos y mecanismos necesarios para el financiamiento de las metas propuestas. Éstas recién se enumeran pormenorizadamente a partir del punto 7.
Estudiar la Plataforma Electoral UP – 2019 es un deber militante. Allí se expresa lo que muchas veces ya sabemos, y lo que quisiéramos decir, pero con las palabras colectivas de compañeros que dedicaron mucho tiempo a formularlas. Hay un orden lógico y cada propuesta se vuelve realizable en un necesario encadenamiento de pasos previos o complementarios.
Ya lo aclaramos en relación al Programa: el orden lógico no impide que la lucha ciudadana o la coyuntura política permitan acceder a conquistas que no estaban pensadas en ese orden; en ese caso, la Plataforma nos sugerirá, cono hoja de ruta, qué debemos hacer para consolidar las conquistas obtenidas.
Podemos organizar una reunión barrial o de compañeros de trabajo para discutir esta Plataforma, con todo el espacio necesario para preguntas y para críticas de las que tomaremos nota. También podemos promover en esos mismos espacios un debate donde personas de otros partidos traigan su Plataforma e intercambiar respetuosamente con ellos las metas y las formas de alcanzarlas. Y en ese rico intercambio, ante muchos ojos y oídos, no debemos improvisar si no sabemos responder una pregunta de un vecino o de un oponente. Convencidos de la justeza de nuestra causa, muchas veces tenemos que tener el valor de decir “eso no lo sé, pero sé a quién podemos preguntar juntos”
Hay otro aspecto en que la Plataforma también nos ayuda: es cuando la confrontamos con el camino ya andado. Muchas plataformas prometen lo que todos deseamos: trabajo, seguridad para nuestra familia, mejor Salud y Educación para todos, reactivar la pequeña producción rural y el pequeño comercio urbano, servicios públicos accesibles y eficientes... Pero ¿quién puede dar testimonio con sus hechos del pasado que va a cumplir en el futuro?
Nuestra Plataforma Electoral es espejo del límpido camino ya emprendido, incluyendo nuestra joven trayectoria en el Parlamento. Es además centinela, en manos de todos, para que nadie entre nosotros se desvíe del camino. Bueno, comencemos a analizarla con detenimiento.
(*) Maestro e historiador, candidato a la Presidencia de la República por Unidad Popular.
